El líder de la industria tortillera, Juan Carlos Dávila, volvió a exigir apoyo gubernamental ante la “psicosis por precios” que están provocando el encarecimiento y el acaparamiento de insumos para elaborar tortilla, un producto excluido de la canasta básica.

Denunció que hay acaparamiento de maíz grado consumo humano por parte de Seguridad Alimentaria de México (SEGALMEX), lo que ha desestabilizado y lacerado a más de 110 mil expendios de masa y tortilla en todo el país.

Aunado a ello, dijo que los productores de tortilla sufren el hostigamiento de Ricardo Sheffield, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), quien amenaza con cerrar negocios que rebasen el tope de 22 pesos por kilogramo de tortilla, a pesar de que el precio de este producto se liberó desde 1999 y depende única y exclusivamente de la oferta y la demanda.

“Pero la PROFECO no está vigilando las tiendas de conveniencia, donde se venden kilos de 750 gramos y donde el paquete de tortillas no dice de dónde vienen ni con qué están hechas”, advirtió.

Además de la pérdida de empleos y la quiebra de muchos negocios dentro del gremio tortillero, Dávila señaló que la tortilla está fuera de la canasta básica y Seguridad Alimentaria no ha podido explicar por qué.

“La tortilla no está incluida entre los 40 productos que maneja Seguridad Alimentaria como esenciales. Es un deber de este órgano explicarlo y no sabemos por qué no entró la tortilla a la lista básica. Es una omisión imperdonable”, protestó el Presidente de la Gran Alianza de la Tortilla, quien adelantó que no tratarán de bloquear carreteras ni cerrar oficinas gubernamentales, porque ante todo está el diálogo.

“Queremos que Sheffield lo entienda. Nos subieron el precio de la harina y del gas LP. Es urgente hacer ajustes de acuerdo con los costos de producción de cada negocio o cada zona”, explicó.

Finalmente, reconoció el ofrecimiento del gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien puso a disposición del gremio los silos del parque agro-tecnológico Xonotli, ubicado entre Salamanca, Santa Cruz de Juventino Rosas y Villagrán.

“Es el primer Gobernador que se pronuncia. No representamos ni nutrimos corrientes políticas, pero el gesto se agradece. Nuestro compromiso siempre será por el pueblo y seguiremos luchando por el pueblo”, concluyó.