La Secretaría de Salud de Guanajuato se une al Día del Prematuro 2024 garantizando una atención especializada para todos los guanajuatenses que nazcan bajo esta condición.

     De enero a septiembre del presente año se registraron 27 mil 700 nacimientos prematuros en la Secretaría de Salud, informó su titular Gabriel Cortés Alcalá.

La dependencia estatal cuenta con 17 hospitales públicos acreditados en Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), informó el Secretario de Salud – Gabriel Cortés Alcalá.

Estos 17 hospitales disponen de servicios intensivos neonatales de vanguardia y especialistas con alta preparación para atender a bebés que nacen prematuros o inmaduros, y que de sobrevivir sin atención médica tendrían graves consecuencias en su desarrollo.

Estas unidades cuentan con equipamiento especial para el cuidado y tratamiento de los menores prematuros o en situación de riesgo, entre los que destacan incubadoras, ventiladores de alta frecuencia y demás aparatos que permitan su desarrollo óptimo.

La prematuridad es la principal causa de mortalidad en niños menores de cinco años, constituyendo un problema crítico de salud pública.

Cortés Alcalá informó que cada año a nivel mundial nacen 15 millones de niños prematuros, de los cuales más de un millón fallece por complicaciones relacionadas.

El 90% de estas muertes ocurre en el primer mes de vida, y el 98% se registra en países en vías de desarrollo.

El aumento de los nacimientos prematuros está vinculado a factores maternos, sociales, económicos y ambientales, como pobreza, inequidad, acceso limitado a alimentos nutritivos y servicios de salud, así como políticas insuficientes de promoción de la salud.

Además, los embarazos en adolescentes menores de 18 años y mujeres mayores de 35 años, junto con gestaciones múltiples derivadas de técnicas de reproducción asistida, han incrementado significativamente los casos de prematuridad.

Los recién nacidos prematuros enfrentan desafíos complejos debido a la inmadurez de sus órganos, lo que puede derivar en discapacidades permanentes.

A pesar de esto, avances médicos, como el uso de ventilación asistida, surfactante pulmonar exógeno y corticoides prenatales, han mejorado significativamente la supervivencia, permitiendo que bebés nacidos desde las 22 semanas con peso menor a 1 kilogramo puedan sobrevivir.